Para qué el miedo

A medida que iban pasando los años, fui acumulando miedos, los cuales se quedaron en mí. No era capaz de ponerles fin. Esto hacía que tuviese impedimentos a la hora de actuar. Fui perdiendo la confianza, pero a la vez llevaba una máscara para que nadie lo notase.
La palabra "miedo" se volvió grande para mi, por lo llena de contenido que estaba. El decir "miedo" abarcaba infinidad de argumentos. Miedo a.......tantas cosas.
He aprendido que no hay que perder el tiempo buscando culpables y menos aun, sintiéndote mal por ello. Ahora sé que gano más invirtiendo mi tiempo en ponerme a buscar soluciones, para así, hacer que poco a poco vayan desapareciendo.
La vida está llena de miedos concretos. Cada vez eran más, terminé cogiéndole miedo, a la vida. Me sentí perdida e incapaz de avanzar. No dejaba que mi mente fuera más allá. Me limité a dejar pasar los días. Miedo al fracaso.
Cuando escuchaba que todo pasaría y entendería el por qué de las cosas pensaba que era un decir. Realmente, era cierto. Todo es más fácil. Sólo en nuestra en mi cabeza existían complicaciones. Es tan fácil como no ver, ser prácticos, y dar al interruptor, aparecerá la luz.
Cada cual, ve lo mismo de diferente forma. Lo importante es saber escuchar y analizar lo necesario.
Para apreciar lo bueno de la vida antes tenemos que conocer lo malo, así nos resultará más fácil admitir lo que realmente nos hace sentirnos felices. Si sabes lo que no te gusta, lo que no quieres. Antes llegarás a encontrar, lo que sí que quieres.